En un mundo digital como en el que vivimos, la globalización de los mercados es ya un hecho. Con la llegada de Internet y la tendencia al alza del e-commerce, nunca ha sido tan fácil para las empresas acceder a mercados extranjeros. No obstante, no por ello es un proceso sencillo. Si un negocio quiere que sus productos o servicios lleguen a traspasar las fronteras nacionales (con éxito), no basta con tener una página web y esperar que los usuarios de cualquier parte del mundo accedan a ella. Así, sin más. La localización multilingüe es uno de los factores claves para llegar a tener éxito en el proceso de internacionalización de cualquier empresa.
Pero, ¿por qué? Cuando hablamos de la acción de comprar, hay dos conceptos esenciales que interfieren en la decisión: la accesibilidad y la confianza. Ambos aumentan considerablemente cuando los contenidos se encuentran en el idioma materno del usuario. De hecho, el 66% de las personas elegirían un producto con información en su idioma si tuvieran que elegir entre otro similar en otra lengua, según el informe Can’t Read, Won’t Buy de la consultora CSA Research (2020). Y esta cifra se dispara hasta el 85% para aquellos que tienen dificultad para entender el inglés. Estos datos demuestran que, a pesar de que parece haberse aceptado el inglés como lengua universal, realmente el idioma de los negocios es el idioma del cliente.
¿Qué es la localización?
La localización va mucho más allá de traducir una página web o las instrucciones de uso de un producto. Según la Globalization and Localization Association (GALA), la localización es «el proceso de adaptar un producto o contenido a un lugar o mercado específico”. Es decir, no solo consiste en traducir, sino que hay que adaptarlo a la idiosincrasia cultural del país en cuestión.
Por ejemplo, si un negocio quiere distribuir productos en España y México, se podría pensar que no es necesario realizar ningún cambio porque el idioma es el mismo. Sin embargo, el vocabulario, las expresiones, los acentos, la cultura o incluso la moneda son diferentes. Estas diferencias se acentúan en idiomas más lejanos, como podría ser el árabe, en el que, empezando por la escritura y la lectura, estas se realizan de derecha a izquierda, con todo lo que implica.
Las ventajas de la localización
Aunque ya hemos revelado algunos de los beneficios que aporta la localización de productos, existen una serie de ventajas a considerar para cualquier empresa que desee expandir sus fronteras:
-
Experiencia de usuario
La UX (User Experience) de los clientes extranjeros mejora considerablemente, ya que consumir un producto en su propio idioma influye directamente sobre la facilidad de uso, la accesibilidad o incluso en la calidad percibida por el cliente.
-
Ventaja competitiva
Una buena forma de diferenciarse de los competidores es localizar los productos y la página web. Son muchas las empresas que piensan que con tener una versión en inglés es suficiente. Esta creencia es una buena oportunidad para destacar entre ellos atendiendo a tus clientes en su idioma nativo.
-
Reputación de marca
Darle una atención personalizada al cliente, ofreciéndole contenidos e información en su lengua, genera una mayor confianza y crea relaciones más cercanas. Por lo que la reputación de la empresa se extiende más allá de las fronteras nacionales.
-
Aumento de las ventas
Como se ha mencionado al comienzo de este artículo, la mayoría de personas prefieren comprar productos que están en su idioma nativo y que ofrecen precios en su moneda local, lo que conllevaría a un aumento de las ventas en los mercados de destino.
Por qué necesitas expertos en localización
Aunque para llevar a cabo la localización de un producto o una web es necesario realizar una traducción al idioma en cuestión, esto es solo una parte del proceso. Es necesario tener un conocimiento profundo de la cultura del país, sus valores, sus costumbres… Por eso, el trabajo de un localizador puede llegar a ser muy diverso: desde adaptar una página web y su e-commerce hasta traducir el contenido de un software y adaptar sus símbolos, iconos o imágenes al mercado de destino.
En Intertext, llevamos más de 30 años seleccionando traductores en todo el mundo para realizar esta labor con la mayor calidad y garantías posibles. Contamos con un equipo internacional con traductores tanto en los países de origen como de destino de nuestros clientes. Trabajar con traductores nativos garantiza en gran medida el nivel de entendimiento requerido para realizar este tipo de proyectos. Además, nuestro equipo es seleccionado siempre cuidadosamente para garantizar la máxima calidad del proyecto en cuestión.
Si estás pensando en lanzar tus productos o servicios a un nuevo mercado, no dudes en contactar con nosotros. Estaremos encantados de resolver todas tus dudas y ayudarte en tu proceso de internacionalización.